viernes, 25 de abril de 2014

Sudor



No quiero hablar
ni de lo áspero
ni de lo bello.

Voy a sudar este flujo de improperios
en este torbellino tórrido
propio de antiguos gobiernos.
Enriquéceme los peros
y sigue vertiendo en mi batucada de vasos.
Excreta esas mariposas de humo
viciosas que te devoran los pulmones.
Quiero perseguir  tus lagartijas infantiles
por el sendero de plomo y escarcha,
sin soldaditos.
Desafiando manos urbanas
y urbanitas brazos pérfidos,
y almohadas de neblina embalsamada.
Quiero sentir el rubor de faldas y barbas
en días de feria.

No quiero hablar
ni de lo áspero
ni de lo bello.

Voy a secar este sudor
muda en el desvelo psiquiátrico
de no querer dormir si no es contigo.

jueves, 24 de abril de 2014

CEBOLLAS

Después de tiempo sin escribir,voy a romper mi estigma de ágrafa trágica. Mi mal de Montano va a ser rescatar un poema "muerto" en un cajón y darle un soplo, el justo para que lata de nuevo. Ahí va.

Despunta el sol, por mera rutina
y a su paso van abriéndose las cortinas,
de esas casas que se ven desde la mía.
Yo miro crecer el pánico en las aceras
en los lánguidos amaneceres
en los que sin verbo ni orden
reivindico melancolía.
Alabo los llantos a mediodía,
ensalzo cuando el café sale más amargo, y brindo.
Elogio los cuchillos penetrando en las cebollas,
lagrimas sin reptil, pedagogas; 
antecesoras de la inspiración inane.
Nada soy con esta felicidad eunuca
en este no pasar absurdo
nada en la cima de las astas,
medias banderas.
Reivindico melancolía,
soledad, alejamiento, ira, amor y desdén.
Para no estar muertos.

domingo, 20 de octubre de 2013

ALAS

Él, sin embargo, seguía inmerso en la neblina obscura que lo reflotaba en aquel viaje a ninguna parte. Las turbulencias anunciadas por megafonía y destiladas con la sonrisa inane de la azafata, eran la expresión terrena del vaivén de sístoles y diástoles que le percutían el pecho al pensar que aquel vuelo, no era sino el deseo histérico de recuperar las alas, sus alas, que yacían cosidas al somier compartido que apenas unas horas antes regaba con su sudor y el de ella. Elixir digno de dioses sustituido ahora por una ridícula botella de ron dominicano. Señorita, otro por favor.

MUMÚ

<<No conocían el mar
y se les antojó más triste que en la tele>> (J.Sabina)

Las hojas del periódico esparcen
las heces de los necios y la sangre
adolescente de quienes defienden al líder
y de quienes lo aborrecen.

La calle huele a nada, y sabe a nadie
pero está llena de tus que llevan hambre
detrás de la pupila, ¡son pura carne!
del cañón que aguardamos a que disparen.

Y yo en tu vientre, escafandra estéril,
te beso y la metralla de la Franja no me alcanza,
y libo tu néctar ajena al estiércol en B,
a la desfachatez, in English, del cacique electo.

Y yo en tu vientre, besando,
rindiendo culto a los poros que te hacen hombre,
mientras se televisa la miseria pública
y el circo se queda sin pan, ni lumbre.

Quiero llenarte la boca de futuro
que se les caigan los dientes
y se los trague la tierra.

Y yo en tu vientre.

martes, 25 de diciembre de 2012

Y fuera el mundo

Huele a invierno que apesta,
y el otoño debajo del nórdico
es más frío.
Bruce Springteen gira esférico
en mi habitación
y el funcionamiento del corazón
me quema las manos.
Los lápices de colores
llenan mis ojos
de una primavera
ágrafa, trágica.
Y fuera el mundo.
Dentro las vísceras
y fuera el resto, todo, tú.
Embriaga la nieve derramada
y la sangre manando de miles
de pechos, ajenos.
Palabras manoseadas
sonidos, como ladridos
como el chirriar de lo inventado
bajo las normas.
Y fuera el mundo.
¿Cómo describir la nada?

El tiro que no damos


Sin un Euro en las Vegas,
me azotan las cadenas 
del hijo patriota sin bandera
que desertó de la incultura
con gomina y teletienda.
Se me llena el pecho de hambre
y el bolsillo inmaculado suda
una moneda.
Como un niño, bajo las sábanas,
escribimos, los cuentos que no quieren que leamos.
El último verso está en blanco.
Somos la culata del tiro que no damos,
y pedimos sin gaznate 
que no nos golpeen el estambre.
Fieros esbirros de la nada,
descerebradas balas de goma,
en paro, sin casa.
El último verso está en blanco,
alerta, silente, vendado.
Y tenemos en el vientre 
un nervio sin dientes
que nos pide batallar.
En la vega baja, sin un euro
germánicamente estériles
se nos llenan los labios de metralla.

Pero el último verso es nuestro,
somos asquerosamente presente.


 

lunes, 27 de agosto de 2012

Poema sin título 2

Ignoro las causas
escucho los ecos
que tantean el aire
en busca de huecos.
Sonrisas y llaves
de puertas que esconden
lo que en tus ojos arde.
Y liban poemas
de sol y vinagre
en estambres de azúcar y edulcoradas sales.
Enajenados deshielos
y endurecidos panes
y voces de niños
que no tienen padres
y viven de sueños
y mueren de hambre.
Al otro lado de la pantalla
como mi sed, como el verano.